viernes, 15 de julio de 2011

El fin del mundo

A veces pienso en bombas. Bombas que caen del cielo y explotan en el balcón. Todo muy tranquilo, alguien mirando Tinelli de fondo y ¡Pum!; bomba.
Entonces corremos adentro, nos refugiamos en el departamento, cerramos las ventanas y rezamos para que paren las bombas.
Pero las bombas no dejan de caer, entonces una explota adentro del departamento, y de golpe te das cuenta que nunca habías pensado que el mundo se iba a terminar así.

1 comentario:

cuti dijo...

no, es cierto. Pero al menos te das cuenta de que termina, eso es algo. Mi temor es que termine y ni te enteres.