lunes, 14 de noviembre de 2011

1, 2, 3, probando (again)

Hace un tiempo que vengo considerando retomar el blog. En realidad, nunca lo dejé. Bueno, lo dejé y retomé intermitentemente. La cuestión es que tengo ganas de retomar el blog. Ahora. Retomar el blog y dejar el cigarrillo. Vengo acumulando muchas cosas sobre las que quiero escribir en formato blog. Quizá se trate de encontrar una nueva forma para este blog. O no. Pero, por ejemplo, algo de lo que tengo muchas ganas de escribir, con fotos y videos (gracias, Blogspot), es sobre The Dreamers, la película de Bertolucci. Hace un tiempo le dije a mi querido maestro, Fernando G. Mazzeo, cuán conmovida estaba por haber visto por primera vez esa película. Que no se podía ser —o haber sido— joven sin haber visto a la Nouvelle Vague. The Doors. Bukowski. Etc.
Otras cosas sobre las que me gustaría escribir: la aparición del libro Los prisioneros de la torre, el ciclo de poesía de chicos y chicas de 18/22 años al que fui, el descubrimiento de Julia Kristeva, la lectura de El segundo sexo, todas las situaciones falochocentrista que me ocurrieron en estas últimas semanas, el descubrimiento y comprensión de la puntuación —¡la puntuación es todo!—, el descubrimiento y la comprensión de la gramática —¡la gramática es todo!—, la epifanía y las figuras retóricas —¡la epifanía y las figuras retóricas! ¡uaaauuuuu!—, el descubrimiento y lectura de Dorothy Parker, Carson McCullers, Dino Buzzati y Saki a quiénes todavía no les he dedicado casi ninguna línea, líneas de amor y pasión, etcétera, etcétera, etcétera.
Para escribir sobre algunos libros se necesita primero tener esos libros, para tener esos libros se necesita primero acomodar la economía personal, para acomodar la economía personal se necesita primero un cuarto propio, para tener un cuarto propio se necesita primero mudar de casa (en eso estamos). Y así, al infinito. Pero algunos círculos viciosos se transforman en círculos virtuosos gracias a alguna pequeña fuga, quiebre, movimiento, cambio.
Para escribir, por suerte, hay miles de cuartos propios. Tantos como bares en la ciudad. Ahora, a retomar el blog.

7 comentarios:

cronista sentimental dijo...

me gusta encontrarte acá -más que allá.

simpática y puntual dijo...

¡hola! happy reunion. see you here, there and coming soon in bs as.

simpática y puntual dijo...

estoy leyendo tu nuevo blog, me gusta, hay que investigar lo de los comments.

cuti dijo...

bienvenida atrás entonces.

simpática y puntual dijo...

¡hola, cuti!

Tommy Barban dijo...

Back to the future! Me alegro.

simpática y puntual dijo...

¡back to the future! ¡back the future 2!
hola, tommy.

happy reunion.
qué bueno reencontrarlos.